La prevención y la intervención en salud mental son considerados asuntos de extrema urgencia según la Asamblea Mundial de la Salud.
Los delegados acordaron la necesidad de intensificar los esfuerzos a nivel mundial para frenar el impacto de las enfermedades no transmisibles (entre las que se encuentran los trastornos mentales), solicitando que la prevención y el control de estas enfermedades se trate específicamente en la Asamblea General de las Naciones Unidas que tendrá lugar el próximo año, 2019, dada la trascendencia y alcance de este problema.
Se requieren medidas urgentes para mejorar la atención clínica de estos problemas, sobre todo, mediante la aplicación de enfoques multisectoriales y basados en la evidencia. Asimismo, se remarcó la importancia de adoptar un marco de salud pública, centrado en la persona, que contemple la prevención, la promoción de la salud mental y el bienestar y los cuidados paliativos.
CONCLUSIONES
Los trastornos mentales y otras condiciones de salud mental contribuyen a la carga mundial de enfermedades no transmisibles y que las personas con trastornos mentales y otros problemas de salud mental tienen un mayor riesgo de padecer otras enfermedades no transmisibles y tasas más altas de morbilidad y mortalidad.