Resumen de la Ponencia “La vida adulta de las personas con experiencias adversas en la infancia, o trastornos de apego. Problemas y éxitos”, de Timanfaya Hernández Martínez
Timanfaya Hernández comenzó su ponencia mencionando la clasificación DSM V, que incluye expresamente el Trastorno del Apego, en el ámbito de los “Trastornos Relacionados con Traumas y Factores de Estrés” y sus características diagnósticas.
Se consideran dentro de este trauma están los niños que han experimentado un patrón extremo de cuidado insuficiente como por ejemplo, negligencia o carencia social, o cambios repetidos en los cuidadores primario
Nos explicó Timanfaya como muchos de sus pacientes adultos con patologías mentales graves padecieron una infancia con exposición a situaciones de gran adversidad. Esto le hizo cuestionarse cual sea la relación entre la adversidad temprana en la infancia o el trauma infantil y el desarrollo de psicopatologías en la edad adulta, motivo que centra la investigación de su tésis.
Parece encontrarse bastante correlación entre el maltrato infantil y distintas patologías graves, como por ejemplo, la esquizofrenia, en la edad adulta, por lo que puede afirmarse que el maltrato psicológico durante la infancia produce alteraciones neuroevolutivas que potencian el riesgo del desarrollo de la enfermedad psicótica.
Ello se realiza no a través de mecanismos genéticos, sino epigenéticos. Se desconecta a través de la metilización, la expresión del genes en cuestión.
Con frecuencia, los pacientes llegan a la consulta con síntomas de depresión, vacío existencial y otras dificultades. Una de las primeras misiones del psicologo es “normalizar”; expresarle al paciente que lo que le ocurre es “normal.” A menudo, se usan los siguientes ejemplos: si se te ha roto una pierna, te queda una cicatriz y a nadie le extraña. De igual forma, en lo mental, puede
aparecer esa angustia porque hubo una lesión emocional y eso te causa terror.
Se observa desde la clínica como son bastante frecuentes los niños adoptados de orfanatos extranjeros resultan comúnmente afectados, especialmente si se les retiró de los padres durante las primeras semanas de vida.
Con frecuencia ha observado como a los niños institucionalizados en acogida se les cambia el terapeuta con el que habían establecido un vínculo. Esto es propio de una sociedad enferma que generará más enfermos y es contrario a toda intervención en el ámbito médico y de salud, siendo necesario concienciar a la Administración. (momento que arrancó vítores del público presente en la sala).
Durante el coloquio surgieron preguntas interesantes como ¿cómo crear seguridad en momentos de crisis y violentos? Se puede aplicar la técnica de la contención física, abrazando, mejor una persona grande y trasmitirle al niño que “vamos a pasar este momento juntos”. Darles un mensaje de “estoy aquí, no te voy a abandonar”. También ayuda que se creen un rincón en sus casas con cosas que les gusten (cuadernos, muñecos…) y se refugien cuando se enfaden. Esto no es igual al rincón de pensar, que es más bien un castigo.
En general, es preciso adaptar la técnica al paciente y no vicecversa. Por ejemplo; . Terapia Gestalt, Conductual, Mindfulness, no todo funciona igual en todos los pacientes y desde luego el terapeuta tiene que establecer el vínculo jugando etc. Y focalizar la terapia en el comportamiento perturbador que presenta en ese momento, preguntándose ¿cuál es el objetivo que quiero conseguir ahora, qué es lo más disruptor ahora?
Por último dejó sentado un principio nítido; trabajar todos juntos, padres, terapeutas, educadores, administración, para reconocer este trastorno, las dificultades de estos niños y sacarlos adelante con el empuje de todos.
Cada vez somos más los que nos implicamos y comprendemos la problemática a la que hacemos frente.
Puedes bajarte la ponencia en este enlace:
https://drive.google.com/open?id=1g8Ls_lOE-pzmfk3ql_fQAkLa5kWkYRym
Puedes ver el vídeo en este enlace: